viernes, 29 de enero de 2010

Protos Gran Reserva 1994

No cabe la menor duda que estamos ante un clásico entre los clásicos. Se trata de un Ribera del Duero por todos conocido, que yo personalmente había tenido el gusto de probar en todas las modalidades excepto el gran reserva del que hoy vamos a hablar.

Se trata de una botella que llevaba en casa entorno a 8 años y del que teníamos ciertas dudas si estaría en un estado aceptable o si por el contrario estaría ya en declive. El caso es que la abrimos con serias dudas que al poco tiempo se disiparon por completo cuando vimos el corcho y olimos el interior de la botella.

Como es casi obligado en este tipo de vinos lo decantamos convenientemente para poder apreciar todos los matices una vez oxigenado convenientemente el vino. Lo primero que me llamó la atención fue que esperaba un color mas anaranjado o teja (tened en cuenta sus 16 añitos) y sinembargo se trataba de un color mas bien cereza con ribete azulado.

En la fase olfativa lo mas llamativo a parte de los aromas de fondo a cuero y tabaco, son los marcados balsámicos incluso llegando a olores mentolados intensos y la madera siempre presente aunque no invasiva. Descataría sobre todo es la evolución a medida que los vas probando, puesto que de una copa a otra el vino evoluciona variando por completo sus aromas, donde puedes apreciar como va apareciendo la fruta.

En boca resulta muy redondo con un buen paso y un retronasal intenso, destaca además la marcada fruta madura del tipo ciruela o moras.

Os dejo una nota de cata de la bodega que la verdad me parece un poco corta y algo rimbombante con frases como "no lo podrás olvidar" "soberbio vino", creo sinceramente que es preferible dar una guia para catar el vino y no ponerle flores. En fin creo que honestamente es un buen vino aunque sus casi 40 Euros hacen que sea mas complicado acercarse a ellos.

Nota de cata de la bodega:

La vida de este soberbio vino viene marcada por su estancia de 24 meses en barrica de roble y un mínimo de 36 meses en botella.

Mira: su color cereza intenso no va a dejarte indiferente.
Huele: servido a 18 °C los sentidos se prendan de un bouquet que varía con el paso de los minutos.
Su sabor: es aterciopelado y redondo en boca y tiene la suavidad propia de su categoría. Su retrogusto es elegante dejándote un recuerdo que difícilmente vas a poder olvidar.

PUBLICADO POR TONI.

No hay comentarios: