En el local había gente, sobre todo en la zona de fuera, que tiene mesas altas y que está más enfocada a picar algo que a cenar, para lo que está destinada la parte trasera. Nos dieron una mesa para cinco personas y nos trajeron la carta. De entrantes tienen una larga lista de platos algunos más novedosos que otros y de los cuales escogimos Txangurro, servido en una cabeza de buey de mar, templadito y rico, aunque todos echamos de menos que nos sirvieran unas tostas para acompañarlo, en lugar del pan normal ( por cierto, sosísimo ). A continuación nos trajeron un Salteado de Verduras con Queso bastante correcto, pero sin el punto crujiente que a mi me gusta en las verduritas de este plato. El queso, de cabra, sabroso y en su punto. Y por último pedimos unos Chipirones Encebollados, que a mi también me parecieron correctos. Las raciones son bastante abundantes, sólo pensar que alguien pueda meterse entre pecho y espalda esa ración de chipis....También he de añadir que antes de estos entrantes nos sirvieron una cucharita de una especie de salpicón de centollo que estaba realmente buena.
Pasamos a los platos... y nos encontramos con que había jornadas de arroz, con lo que el plato principal lo teníamos bastante claro los componentes de Catalia. Una carta bastante amplia desde la ensalada de arroz, el de bogavante, con carne, basmati con marisco... Nos decidimos por el Arroz Negro con Calamares y el Arroz de Pollo de Corral y Curry, para compartir entre los tres. En primero estaba bueno, nada en especial, pero bueno. Echamos de menos el sabor de un fumet más contundente, pero en conjunto correcto. El segundo nos lo trajeron en una fuente de barro, por lo que pensamos que lo cocinarían en el horno. Al servirlo nos encontramos con un fondo de aceite que nos llenó antes de probarlo. Después, el punto del arroz estaba bueno, un poco flojo en el curry, pero personalmente tenía que escurrir cada bocado que tomaba. El otro plato que se tomó para las otras dos personas fue Rabo de Toro, nuevamente una contundente ración. Quienes lo tomaron dijeron que estaba muy conseguido y sabroso.
Los vinos que probamos fueron en primer lugar El Sequé, de DO Alicante y de uva Monastrell, que personalmete me encantó, sobre todo el toque dulce que muestra. Una lástima que antes de abrir la botella nos comentara la camarera que era la última que les quedaba por si luego no queríamos cambiar de vino. Cuando nuevamente pedimos la carta nos decidimospor un Meler, DO Somontano. Aquí fue cuando vino otro camarero y disculpándose nos informó que tampoco lo tenían y que había sido casualidad que pidiéramos precisamente los que les faltaban. A la tercera fue la vencida y pedimos Los Aguileros, ya conocido de nuestra cata de vinos tintos.
Pasamos de los postres directamente pedimos café y una ronda de chupitos. Finalmente la cuenta ascendió a 156,40€, es decir a unos 31€ por persona, lo que en general nos pareció excesivo, teniendo en cuenta que pedimos tres platos principales para cinco personas.
En conjunto me dijo muy poco... Es una lástima que no hubiera acudido antes cuando unos cuantos amigos habían disfrutado de las Jonadas del Bonito y salieron del todo encantados. Yo no puedo decir lo mismo de las del arroz. Quizá volvamos algún día a la parte de picoteo. Creo que la carta cambia algo y quizá encontremos algo que nos convenza. Ya os contaremos... Por cierto, si tenéis alguna opinión compartidla con nosotros, a lo mejor lo pillamos en un día malo!!
PUBLICADO POR ESTHER
Simplemente añadir que en la parte de delante la carta es distinta y encuentras más variedad de tapas y raciones. Como comenta Esther , el arroz de calamares es bastante normalito (20 eurazos) y el de pollo al curry tenía un aceite en la base que a mi no me gustó y , a mi modo de entender, tampoco era nada del otro mundo(18€) . Eso sí, las raciones eran muy abundantes.
El sitio está bien ambientado y agradable aunque en su versión restaurante mi opinión es un poco tibia. De todas formas seguramente volveremos a la zona de delante a probar otras cosas.
PUBLICADO POR DANI